Cuando tu vida depende de una máquina para poder simplemente vivir, hay cosas que te cambian en tu vida cotidiana, evidentemente ves las cosas de diferente manera. Ves las cosas desde otro punto de vista, ni mejor ni peor, simplemente diferente. No todos somos iguales ante los mismos problemas o situaciones de la vida, con lo cual no a todos nos afecta de la misma manera estar conectados a una máquina. Estar en diálisis, implica seguir unas pautas para realizar una buena y una calidad de vida aceptable y poder desarrollar tu vida cotidiana lo más normal y digna posible.
Para mí lo primero y fundamental es el estado de ánimo, aquí influyen muchos factores, la familia, el trabajo, (en el caso que lo puedas realizar), amigos, tu situación personal, etc…, cuando en la vida va todo bien, tienes salud, no te falta trabajo, tu familia y amigos están ahí, es muy fácil llevarlo bien y las «palmaditas» en la espalda suelen ser muy a menudo. Pero cuando te falla lo más importante, (la salud)…, evidentemente queramos o no, nos cambia la forma de ver las cosas. Y ves realmente quien está a tu lado a la hora de la verdad. Es en estos momentos cuando más necesitas a la gente. En mi caso tengo que decir que ese problema no lo tengo ni lo he vivido, tanto la familia como los amigos me han arropado en los momentos más delicados y eso es de agradecer, porque por desgracia en todo este tiempo he visto de todo, más cosas malas que buenas y he visto que no todos pueden decir lo mismo. Sentirte arropado en momentos delicados ayuda a llevar las cosas mucho mejor.
Otro aspecto importante en esta situación es tener la mente ocupada durante las sesiones de diálisis, para mi es importantísimo. De esto ya hablamos anteriormente en el blog, se pueden hacer muchas cosas, más de lo que nos imaginamos, ¿Qué se puede hacer en una sesión de Diálisis?. En mi caso el tiempo lo dedico en el blogmientras escucho música o algún programa de radio, por cierto, me encanta escuchar un programa de radio de M80, presentado por Juan Luis Cano y sus colaboradoras Curra Vidal y Sara Solomando que se llama «Arriba España», me ayuda y me alegra la mañana, os los recomiendo. Otros prefieren leer, ver la televisión, dormir, hablar con los compañeros e incluso he visto alguna que otra partida de parchís. Con esto quiero decir que lo importante es estar con la mente ocupada y así llevar el tratamiento lo más llevadero posible.
Deciros que a muchos pacientes les cuesta más que a otros asimilar la enfermedad y estar con las sesiones, en estos casos mi consejo sería que no os lo calléis, que lo hablarais con los profesionales, pedir ayuda. Es peor callaros en estas situaciones, que no os de vergüenza consultar con vuestro médico cualquier tipo de problema, pueden y están cualificados para orientarnos ante cualquier situación.
En la diálisis tenemos que tener en cuenta 3 cosas importantes;
La medicación.
El tratamiento.
La dieta.
De estos tres aspectos, dos dependen del paciente, la medicación y la dieta, el otro depende del profesional y del centro donde realicemos el tratamiento. Si conseguimos llevar estas tres cosas de la mano, se puede llevar una vida muy saludable dentro de las limitaciones.
Unas de las limitaciones más importantes que tenemos los pacientes de diálisis, es la movilidad. Está claro que cuando dependemos de una máquina, no podemos tener la misma movilidad que cualquier persona, por norma general se está 3 días a la semana en días alternos entre 3 y 5 horas, dependiendo del paciente y de su tratamiento. Pero eso no quiere decir que no tengamos movilidad. ¿Se puede viajar?, por supuesto que si, además es aconsejable. Siempre y cuando sigamos unas pautas y unas normas. Esto también lo hablamos en el blog, ¿Se puede viajar con insuficiencia renal?.
Como es normal tu vida cotidiana te cambia cuando tu vida depende de una máquina, pero deciros que ya que estamos en esta situación, por lo menos llevarlo de la mejor manera posible. Rodearos de la gente que os aporte algo positivo en la vida, tanto familiares o amigos, para mi es fundamental. Disfrutar de las oportunidades que nos da la vida todos los días y de los pequeños detalles. Si hacemos estas cosas, seguro que estar atado a la máquina nos resultará más llevadero.
Hay una frase que nos ha dejado nuestro amigo Pablo Ráezy que me ha marcado, me parece muy oportuna para esta entrada; «La muerte no es triste, lo triste es que la gente no sepa vivir» , así que aprovechemos lo que tenemos, l0 que nos ha tocado y así vivirlo de la mejor manera posible. Es mi consejo para los que estamos enganchados a una máquina y así llevarlo mucho mejor.
Espero que os haya servido de ayuda la información, así que disfruta de la vida luego dónala.
Retomamos el blog con una entrada muy especial dedicada a unas compañeras que desgraciadamente ya no están con nosotros, una entrada que hacía tiempo que tenía aparcada y con ganas de publicar pero cada vez que empezaba a escribir se me atragantaba y no era capaz de terminar. Lo intenté en varias ocasiones y comencé a escribir hace casi un año y nunca lo terminaba, ahora además de necesitarlo me decido a escribirlo y publicarlo, porque pienso que se lo merecen. Espero y deseo que entendáis las sensaciones encontradas en una sala de diálisis donde tenemos todos un mismo común.
Nuestras compañeras Luz y Patri.
Amistad:
La amistad si es verdadera es indescriptible y son sensaciones muy difíciles de expresar, y si se comparten mismos problemas de salud la amistad aún se hace más especial, se nota un «feeling» entre compañeros que compartimos los mismos problemas.
En una sala de diálisis nos encontramos a personas de diferente sexo, edad, ideología, raza, etc…, pero todos tenemos un mismo fin, todos necesitamos un tratamiento para poder simplemente vivir. Personas que seguramente no hubiera conocido si no tuviera este problema de salud, pero me alegro y me siento orgulloso de haberlas conocido. Siempre es bueno estar rodeado de personas que aporten cosas buenas.
Son muchas las horas al día y son muchos días a la semana, las que pasamos juntos, sentados y atados a una máquina compartiendo momentos, a veces buenos y a veces no tan buenos, y cuando hay noticias buenas en la unidad por la deseada y esperada llamada (trasplante) el ambiente que se respira en la sala es agradable. Es difícil de explicar la ausencia de un compañero por un trasplante, es una sensación buena, te alegras por no verlo sentado a tu lado. Pero por desgracia en la sala también la ausencia de un compañero no es solo por el trasplante.
En todos estos años en diálisis he conocido a grandes personas y que me han aportado muchas cosas y grandes valores. Entre esas personas se encuentran Luz y Patri, dos compañeras de batalla. Compañeras que por desgracia ya no están entre nosotros.
Vacaciones:
Hace ahora justo un año, después de un primer confinamiento pudimos salir a la calle y empezamos a tener movilidad, aprovechamos para irnos al sur y así visitar a la familia, dejando en unas condiciones no muy buenas a mi compañera y amiga Luz. Por culpa de esta maldita pandemia y los protocolos del COVID no pude ir a verla todo lo que quería, así que marchamos de vacaciones con más pena que gloria.
En vacaciones recibí la triste llamada, llamada que nunca quieres recibir. Es duro ver marchar a un amigo desde la distancia, y sin poderme despedir como hubiera querido. Lo más triste y curioso de todo esto es que la persona que me comunicó por teléfono este fatal desenlace era mi compañera Patri que meses después sufriría el mismo y desenlace. Pasamos como pudimos ese verano tan raro no solo por las limitaciones que teníamos por el COVID sino por las noticias que recibía desde Coruña. Nuestra compañera y amiga Patri estaba pasando malos momentos.
Cuando terminé las vacaciones, me incorporé en mi centro habitual y recibí la desgraciada noticia, nuestra compañera y amiga Patri nos dejaba. Fue un verano convulso, raro y muy diferente a lo que estamos acostumbrado disfrutar, comenzamos el verano con la triste llamada sobre Luz y terminamos el verano con la misma y desgraciada noticia. Así que tuvimos que apretar los dientes y continuar luchando.
Seguimos luchando:
Aunque son tristes y duros momentos lo que pasamos a veces en la unidad, no queda otra que apretar los dientes y seguir peleando por la vida. Orgulloso por pertenecer a esta gran familia, y aunque es muy duro asimilar los cambios que se tiene que hacer en tu vida para afrontar esta enfermedad, me siento dichoso ya que he conocido a gente con unos valores muy diferentes a los comunes y se merecen el mayor de mis respetos. La vida es demasiada corta y dura como para perder el tiempo en «gilipolleces» así que seguiré luchando y peleando para seguir adelante.
Sin más espero que este tipo de entrada tarde mucho en volver a escribir, así que un fuerte abrazo a mis compañeras estén donde estén, Os echaré de menos y me siento orgulloso y feliz de haberos conocido.
Espero que os haya gustado estas líneas y que haya servido de ayuda la información, así que disfruta de la vida luego dónala.
Hoy en nuestra nueva entrada al blog tenemos el placer de contar con una persona muy especial, una persona que es todo un ejemplo para todos los que estamos en diálisis, Daniel Gallego Zurro. Una persona que se toma la vida con filosofía y con toda normalidad, disfrutando de sus viajes y del momento a pesar de las adversidades. Intentaremos trasmitir con esta entrevista a todos los compañeros y pacientes con insuficiencia renal, que se puede viajar y llevar una vida totalmente normal disfrutando de cada momento estando en diálisis. Gracias Dani por tu aportación, es de agradecer.
Dani en uno de sus viajes, Japón.
¿Quién es Daniel Gallego Zurro?
-Tengo 45 años, vivo actualmente en Valencia y soy diplomado en relaciones laborales. Soy paciente renal desde los 20 años. Empecé el tratamiento de hemodiálisis con 22 años en 1995 (muy joven…). Me trasplantaron cuando tenía 25 años, pero sólo me duró 3 años y medio así que regresé a hemodiálisis con 29 años y hasta hoy sigo mi tratamiento en el hospital, así que llevo 23 años en tratamiento sustitutivo renal (HD y trasplante).
Soy miembro de la junta directiva de Alcer Illes Balears y miembro de la junta directiva de la federación ALCER (Asociación de Lucha Contra Enfermedades del Riñón) desde el 2014.
Siempre me ha gustado el deporte, he jugado en equipos de baloncesto federado antes y después de estar en diálisis. Ahora mis hobbies son viajar, yoga y dar paseos en bici.
Dani en una de sus sesiones, Portugal.
¿Te gusta viajar?
-Viajar siempre ha sido mi ilusión, incluso en hemodiálisis. El horizonte ha sido mi meta, no hay nada mejor que viajar para sentir que estas en contacto con el mundo- Gracias a mis viajes he podido ver y sentir otras culturas, he conocido a gente diferente, otros pacientes y profesionales de la enfermería y la medicina que hoy son muy importantes para mí.
Viajar es una fuente de conocimiento, alivia el estrés y no puedo imaginar una actividad más refrescante para la mente. La gente suele hablar de la búsqueda de la felicidad, pero yo personalmente prefiero la felicidad de la búsqueda, lo que implica salir de la zona de confort, o de la clínica habitual. Es mucho más importante lo que vivimos que lo que tenemos.
He viajado por muchos países en Europa, también en India, Filipinas, Tailandia, Japón, Indonesia, China, USA, Canadá, República Dominicana, Marruecos…, etc.
Viajar me ha enseñado a disfrutar de cada momento y a querer ponerme siempre otra meta. Por eso a pesar de convivir con una enfermedad renal crónica, siempre trato de buscar nuevas escapadas, encontrando los mejores destinos que te revitalizan y te sacan de la rutina. La vida viajando te ofrece oportunidades maravillosas.
¿Te ha limitado la diálisis para hacer viajes?
-Por supuesto que no, nunca me ha limitado a la hora de viajar. Puede decirse que en tratamiento de hemodiálisis dependemos de una máquina para vivir, pero es una máquina que puede encontrarse en casi cualquier país del mundo.
Lo más importante para poder viajar en diálisis, es la voluntad de querer ir.
En España y en Europa todas las clínicas tienen unos estándares de calidad que ofrecen seguridad y una excelencia, que garantiza que la diálisis se realizaran en las mismas condiciones que el centro habitual del paciente. Además en Europa con la tarjeta sanitaria europea el tratamiento de diálisis está cubierto y es gratuito para cualquier ciudadano europeo.
Fuera de Europa los tratamientos son privados, pero se pueden buscar destinos asequibles en países con garantías de calidad y con seguridad de que el tratamientos en diálisis se realizara sin ningún problema.
Disfrutando de sus viajes, Tailandia.
¿Tienes muchas complicaciones a la hora de preparar los viajes?
-El tramite burocrático suele llevar actualmente 1 o 2 semanas como mínimo, dependiendo si es un viaje por España, por Europao por el resto del mundo.
Hay que reservar igual que los hoteles y el avión, el centro de diálisis hablando con el responsable de la unidad, que te solicitara tu informe médico, con tus últimos análisis, tu tarjeta sanitaria europea o tu método de pago en caso de que el tratamiento sea fuera de la unión europea y sea costeado por el paciente.
De todas formas hay actualmente servicios de diálisis de vacaciones, desde Alcer se gestionan plazas de diálisis en cualquier provincia o desde la federación nacional en Madrid, además de compañías de diálisis como Fresenius o Diaverum tienen servicios internacionales de vacaciones que te gestionan gratuitamente el papeleo con la clínica de destino donde vayas a ir de vacaciones.
Indonesia.
¿Qué le dirías a los compañeros pacientes para que se animen a viajar?
-Creo sinceramente que viajar es un derecho, es una cuestión de dignidad que los pacientes en diálisis tengan opciones de movilidad, ya sea por motivos laborales o por placer.
Así que animo a todos los pacientes a que puedan irse de vacaciones al pueblo, a una boda de un familiar, o simplemente a disfrutar de unas vacaciones revitalizantes con su familia y/o amigos. Está demostrado que salir de viaje y conocer otras culturas tiene un efecto positivo en las personas, romper con la rutina de la clínica habitual, nos ayudará a llevar con más optimismo el tratamiento y la carga de acudir siempre al mismo centro de diálisis.
¿Qué sientes cuando viajas y que sensación te produce dializarte fuera de tu centro habitual?
-Siempre digo que hago 2 clases de turismo, el turismo normal que hace todo el mundo visitando ciudades y el turismo del hospital. El turismo del hospital es muy interesante para conocer como se trabaja en otros centros y otros países a nivel de la diálisis, ya que básicamente las técnicas son parecidas pero no iguales, así que yo cogería lo mejor de cada centro y haría “la diálisis perfecta”. Además que el personal de enfermería de cada centro te informa de los sitios que se pueden visitar y conocer, nadie mejor que quien vive en un sitio para informarte y guiarte para ver una ciudad o país. Por España hay muy buenos centros de diálisis, tanto públicos como privados, y gracias al sistema público de salud, que cubre perfectamente la diálisis, se puede viajar casi a cualquier punto de nuestro país. Tenemos mucha suerte de que nuestra seguridad social cubra la diálisis, y de eso eres consciente cuando viajas al extranjero y ves cómo funcionan otros países, sobre todo los más pobres, que no pueden cubrir el tratamiento de diálisis, con todo lo que esto conlleva.
Indonesia.
Me imagino que tendrás muchas historias y anécdotas sobre tus viajes, ¿Alguna que recuerdes con cariño?
-Por supuesto, mucha gente y muchas experiencias siempre viajando a otros países, incluso por España. Recuerdo un conductor de taxi en la India que era diabético, y necesitó que le ayudase a pincharse la insulina porque se encontraba mareado. Tras ayudarle con la medicación y encontrarse mejor, se mostró muy agradecido, sobre todo al saber que me tenía que llevar a la clínica de diálisis. Él estaba convencido de que Buda nos había unido para conocernos y ayudarnos mutuamente en nuestras enfermedades, así que me llevó gratis todas las veces que necesité ir a la clínica de diálisis a realizar mi tratamiento. La verdad que la experiencia nos unió mucho durante un mes que estuve allí en la India, y no pude tener mejor guía y consejero de viaje.
Lo recordare toda mi vida y lo llevo siempre en mi corazón.
¿Tienes algún viaje en mente o algún sitio que te apetezca conocer en especial?
-Un viajero siempre tiene en mente el próximo viaje…. Incluso ya tengo más o menos mirado en que ciudades y clínicas de diálisis podría acudir.
Me apetece mucho ir a Vietnam, siempre me han hablado maravillas de este país, y es uno de los destinos que tengo pendiente de Asia, que siempre ha sido uno de mis continentes preferidos.
Después de esta conversación tan agradable y amena, ¿Qué más se puede decir?, pues agradecer a Dani por trasmitir esa vitalidad que lo hace muy bien. Ya hablamos en anteriores entradas al blog que se puede y que se debe viajar y llevar una vida con la mayor normalidad posible y creo que con las palabras de Dani queda bien demostrado. Simplemente seguir el consejo de nuestro compañero y como siempre decimos, «disfruta de la vida luego dónala»…, GRACIAS Dani por tu aportación que seguro que va a valer mucho, un fuerte abrazo amigo.
Espero que os haya servido de ayuda la información, así que disfruta de la vida luego dónala.
Ya hemos hablado en anteriores entradas al blog de la importancia que son unas vacaciones, ya no solo a cualquier persona sana y en situación laboral normal, sino que también a pacientes de diálisis además de recomendable son necesarias y aconsejables, se debe de tomar como una normalidad poder dializarse fuera de su centro habitual, sería lo más aconsejable. Sabemos de los miedos que existen en muchos pacientes a la hora de dializarse fuera de su centro habitual o de su ciudad. Se puede entender en algunos casos ese miedo ya que no todos somos iguales ni todos tenemos el mismo problema dentro de la insuficiente renal pero si hay la posibilidad de hacer algún tipo de viaje sería algo muy recomendable, siempre y cuando se cumplan unas normas y pautas a seguir desde tu unidad de diálisis, dirigidas por tu equipo médico.
Playa de La Barrosa-Castillo de Sancti Petri
-Pautas y consejos a seguir para realizar el viaje;
Lo primero es tener claro el destino y las fechas a elegir, es importante ya que tenemos que comunicarlo en nuestro centro habitual para que el cuerpo médico nos facilite los documentos necesarios para poder realizar el viaje con la mayor normalidad posible.
Es necesario también comunicarlo con tiempo para que el centro de destino pueda adaptar las fechas pedidas por el paciente. Aquí podrían cambiar turnos y días de diálisis ya que en cada centro existen turnos diferentes.
Llevar consigo toda la documentación que nos prepara nuestro centro para el lugar de destino, importante también avisar con tiempo para que puedan preparar toda la documentación.
Llevar un informe médico actualizado por nuestro médico (muy importante).
Llevar medicación en caso de que fuese necesario, ya que los centros vacacionales no suministran toda la medicación.
Una vez elegido el destino te asignan el centro más cercano, luego simplemente es hacer tu vida cotidiana lo más normal posible.
Como consejo lo ideal sería es llevar el mismo peso entre sesión y sesión que en tu centro habitual, para no tener problemas y que el cuerpo sufra los menos posible.
Evitar excesos, líquidos y exposiciones al sol, como se suele decir, «Sentido Común».
Si el destino vacacional es dentro del país el tema administrativo es sencillo, rápido y fácil de realizar, decirlo con antelación es lo más recomendable. Hay que decir que la mayoría de los viajes de pacientes renales suelen ser en suelo español.
Si el desplazamiento es fuera del país tampoco habría que tener problema alguno, simplemente habría que decirlo con más antelación en tu unidad, ya que el tema administrativo, vulgarmente llamado «papeleo», duraría un poco más. Pero se podría hacer sin ningún tipo de problema aunque se puede viajar a cualquier parte del mundo, es aconsejable tener unas mínimas mediadas de seguridad e higiene.
Vacaciones verano 2017
Se pueden elegir diferentes tipos y destinos de viajes. Pueden ser ocasionales por diferentes motivos, pueden ser por visita familiar, pueden ser simplemente turístico, etc. También puedes elegir playa, montaña, turismo cultural o lo que más guste o apetezca, lo importante es tenerlo claro y saber donde y en que fechas las escoges. No es lo mismo viajar a lugares cálidos en épocas de verano por motivos evidente, ya que no podemos exponernos al sol después de una sesión, podríamos tener problemas de deshidratación, eso hay que tenerlo en cuenta. Pero por lo demás es hacer tu vida cotidiana, con los cuidados de siempre y con la mayor normalidad posible.
En mi caso suelo elegir el mismo lugar de vacaciones por motivos familiares, aunque también me he dializado tanto en diferentes ciudades como fuera del país. En ninguno de los destinos y viajes he tenido problema alguno, al contrario me he sentido como en casa, decir incluso que he hecho amistades tanto con compañeros de diálisis como con el equipo sanitario. Eso tengo que decirlo porque es una tranquilidad para el paciente, decir que te tratan bien, eso te hace sentir a gusto y con mucha tranquilidad a la hora de hacer el viaje. Hoy por hoy los centros están muy equipados y preparados para todo, suelen ser centros nuevos, con equipamiento de todo tipo (por lo menos los que yo he conocido).
Desde hace años suelo dializarme en el mismo centro ya que por motivos familiares mi destino es el habitual. Tengo la suerte de tener un equipo y un centro de muy buena calidad humana y profesional.
Dicho todo esto ahora simplemente decide tu destino y fecha y a disfrutar del viaje, ya que sólo puedes sacar buenas experiencias. La vida es demasiado corta como para no disfrutarla. Viajar es una de las mejores terapias que existen y la vida no se mide por el número de veces que respiramos sino por los lugares que nos quitan la respiración. Viajar es la única compra que haces y te hace más rico, recuerda no necesitas suerte necesitas moverte…
Si no es ahora, ¿Cuándo?
Espero que os haya servido de ayuda la información, así que disfruta de la vida luego dónala.
Después de darle varias vueltas al tema y de pensarlo mucho, quería exponer de alguna manera y explicar sentimientos que se sienten después de varios años en diálisis. En esta nueva entrada al blogos quería hablar que no todos somos iguales y que no todos recibimos de la misma manera el tratamiento, ni sentimos las mismas expectativas a la hora de un trasplantes. Queda claro que esto es algo muy personal y que cada paciente padece y sufre de diferente manera su problema. Influyen evidentemente varios factores a la hora de tomar decisiones tan importantes, uno de los más decisivas es si has tenido alguna mala experiencia con algún trasplante eso es determinante, también influye mucho tu vida personal, aquí entran muchos variables y factores, familia, trabajo, situación laboral, estado de ánimo, etc.
¿Existe miedo al trasplante?
Por supuesto que si, es algo que a mi personalmente me ha influido en algún momento de mi vida para tomar diferentes decisiones, no siempre estamos preparados para afrontar cosas tan importantes, además creo que se debe de estar totalmente convencido y tener claro la decisión que vayas a tomar. Puede que mi mala experiencia con el trasplante influya en todo esto, pero si no te ves convencido, creo que es mejor esperar a que tu estado de ánimo mejore, (a no ser que tu salud esté delicada y dependas urgentemente algún tipo de trasplante) eso lo cambiaría todo. También es importante respetar la opinión del paciente, porque realmente es el único que sabe como se encuentra anímicamente para afrontar este reto. Hablamos de un trasplante, algo muy serio y que cambia tu estado, tu forma de vida, tu calidad, ritmo, etc. Con lo cual es importante estar totalmente convencido.
No es la primera vez que escucho en la unidad a compañeros que piensan de la misma manera, aunque tengo que decir que después por suerte hayan cambiado de opinión y que ahora están felizmente trasplantados. Por mi parte por ahora no encuentro ni el momento ni la necesidad de hacerlo, es difícil de explicar y que muchos no lo entienden, principalmente porque no conocen el problema desde dentro, pero quizás pueda influir que aunque estés atado a una máquina, puedes hacer una vida relativamente normal, con tus limitaciones evidentemente, pero normal. Ya expliqué en anteriores entradas al blog, lo que se puede hacer una sesión, ¿Qué se puede hacer en una sesión de diálisis?, también explicamos si se podía viajar, ¿Se puede viajar con insuficiencia renal?, todas estas cosas influyen y bastante a la hora de tomar decisiones. Pero quizás la razón que más influya sea si has tenido una mala experiencia o tu estado de ánimo. Cada caso es muy diferente, aunque el problema sea común, cada paciente es una historia muy diferente.
Todos sabemos los problemas que acarrean cuando llevas muchos años con el tratamiento y las limitaciones que puedes tener a largo plazo, (hablaremos de esto en siguientes entradas). Deciros que la insuficiencia renal no se cura con el trasplante, te cambiaría la vida evidentemente por razones obvias, pero hay que ser claros, el trasplante de riñón, es una alternativa de tratamiento para la Enfermedad Renal Crónica (ERC), esto es así. Deciros que, numerosos estudios han demostrado que, el trasplante renal es una terapia que mejora la supervivencia a largo plazo cuando se compara con la diálisis de mantenimiento.
Con todo esto, deciros que esto es algo muy personal y que por nada me gustaría influir en vuestras decisiones, esto es algo que tiene que quedar bastante claro, por nada del mundo quisiera influir en una decisión tan importante, lo único que quiero exponer y expresar que cada persona y caso es totalmente diferente. Respetar y sobretodo entender la decisión tomada del paciente es algo fundamental. Es difícil de entender cuando las cosas se ven desde la barrera, aunque también tengo que decir que el apoyo que tengo personalmente tanto por la familia, amigos y equipo médico es totalmente ejemplar.
Muchas veces, por no decir siempre expresamos los sentimientos de diferente manera y dependiendo de nuestro estado de ánimo, es lógico y normal, muchos me preguntan y me dicen que me siempre me ven bien, alegre, contento y que no paro, a pesar de estar en diálisis, lo que tengo claro es que para el tiempo que estamos aquí y con lo que me ha tocado voy a disfrutar todo lo que pueda de la mejor manera posible y con los míos, además cuando uno tiene la responsabilidad de ser padre no puede venirse abajo, y tener que ser fuerte en momentos duros, como se suele decir, la profesión se lleva por dentro y en este caso os puedo asegurar que es totalmente cierto. Lo que más me hace tirar y mirar hacia adelante es verlos crecer y darles lo mejor. No me gusta que me vean mal, al contrario prefiero tomármelo de la mejor manera posible y os puedo asegurar que a veces uno no tiene ganas ni de salir de cama, pero no solucionamos nada no afrontando los problemas. Después de lo que he visto y veo diariamente en el hospital deciros que siempre hay gente mucho peor que uno, así que quejarse no soluciona nada, lo mejor y lo más aconsejable es afrontar los problemas de frente y ser lo más fuerte posible.
Sin más, desear lo mejor a todos mis compañeros y una pronta recuperación a los que lo necesiten, porque últimamente en nuestra unidad hemos tenido malas noticas.
Espero que os haya servido de ayuda la información, así que disfruta de la vida luego dónala.
Ayuda a dar visibilidad y difusión a la insuficiencia renal con nuestra pegatina.
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